Una sala de baño.
Debe ser resistente, estéticamente placentera y altamente funcional. Todo en uno.
Es un modelo de simplicidad y eficiencia, concentrado en un pequeño espacio del
hogar, que debe servir a cada miembro de la familia. Es el que acompaña de
forma receptiva y confortable al ritual cotidiano del cuidado personal, para entrar y
salir o permanecer un rato.
Desde aquí partimos, desde un baño para disfrutar.
Proponemos un espacio cálido y cómodo, con un concepto joven definido.
De texturas y colores que nos hacen sentir bien, que nos conectan con la
naturaleza, la tierra, el mar.
Las diferentes funciones y necesidades: colgado, apoyo, guardado e iluminación
se desarrollan a través de una única estructura liviana de caño, superpuesta al
revestimiento de las paredes y cielorraso. Es un objeto que envuelve al espacio y
le da identidad. Contiene en su conjunto los accesorios de baño, barrales,
bandejas de apoyo y diferentes climas de luz, que cambian automáticamente de
manera suave y lenta.
En la vista principal la estructura incluye al espejo que se ilumina por detrás y
enmarca la mesada con su bacha, que se toma del fondo y engama su color.
El revestimiento combina diferentes medidas en lo alto y en lo ancho en un mismo
tono, llegando con diferentes alturas al gris que pinta las paredes y el cielorraso.
Entre ambos forman una caja engamada.
El piso de porcellanato simil madera se despega de todo y le da una base cálida a
la sala.
Porcellanatos de tonos cálidos, estructura metálica, tejidos rústicos, linos y
vegetación componen un clima placentero para esta sala.
Consideramos que la sensación de bienestar se logra cuando los lugares
están proyectados con sentido y con un concepto definido, amor y mucha
dedicación. Eso se traslada a cualquier escala, desde proyectar una vivienda
completa hasta una Sala de Baño para una familia joven.